Este ejercicio fue fundamental para evaluar y consolidar el Plan de Emergencia Interior, lo que permitió identificar oportunidades de mejora y ajustar los protocolos. Más que una formación técnica, fue un momento de aprendizaje colectivo, en el que todos -usuarios y empleados- pudieron conocer y practicar las rutinas de evacuación, los puntos de encuentro y el comportamiento adecuado en caso de incendio, accidente u otros sucesos.
Este simulacro se realizó en colaboración con varias organizaciones externas, cuya presencia fue crucial para garantizar el realismo y la eficacia del ejercicio. Juntos reforzamos nuestro compromiso común con la seguridad, la preparación y el bienestar de todos.
Mención especial para los más pequeños, ¡que se comportaron como auténticos héroes! Tranquilos y ordenados, siguieron todas las instrucciones y dieron un admirable ejemplo de responsabilidad. Su actitud nos recuerda que la educación para la seguridad empieza desde la infancia, y que el conocimiento es la mejor forma de protección.
Porque la seguridad es un compromiso diario, seguiremos trabajando con rigor y dedicación para que cada respuesta sea siempre un espacio seguro.
Preparar para Proteger - siempre por el bienestar de nuestros hijos.