La mañana comenzó con una actividad sensorial y artística donde la comida fue la protagonista, pero de una forma diferente: a través de la pintura.
Los niños dieron rienda suelta a su imaginación utilizando pinturas naturales elaboradas con alimentos como la remolacha, el cacao o el curry, creando auténticas obras de arte con colores y texturas inspiradas en la naturaleza y la cocina.
A continuación tuvo lugar un divertido taller de cocina, en el que nuestros pequeños chefs prepararon tortitas de avena y plátano. Entre cucharas y sonrisas, aprendieron que cocinar puede ser sano, sabroso y muy divertido.
La jornada terminó con una merienda compartida, repleta de fruta fresca y colorida traída por las familias de nuestros niños, donde este compartir reforzó no sólo los lazos entre el hogar y la escuela, sino también el valor de unos hábitos alimenticios equilibrados desde edades tempranas.
El objetivo de estas actividades era sensibilizar a los niños sobre la importancia de una alimentación variada, sana y consciente, promoviendo prácticas responsables en relación con la alimentación y el medio ambiente desde una edad temprana.
Misión Semilla: Completada con éxito.
¡Descubre el tesoro de una alimentación sana!